Esta advocación mariana se introduce por toda Europa, a finales del siglo XIV, por influencia de los estudios escolásticos sobre la gracia. En nuestra tierra también es conocida como Nuestra Señora de las Mujeres, porque una gran cantidad de mujeres se llamaban Maria Gracia o simplemente Gracia.
En el obispado de Girona, aparte de los altares erigidos con esta advocación en las iglesias ya existentes, en la segunda mitad del siglo XV, hallamos la dedicación de la Font Santa de Jafre con el nombre de "Mare de Déu de Gràcia" el año 1461. Con la misma advocación en Lloret de Mar el año 1472. Una capilla d’Empúries es dedicada a la "Mare de Déu de Gràcia" el año 1475.
Cuentase la curiosa leyenda según la cual la imagen de la Virgen de Gracia fue portada por los ángeles a Empúries desde un pueblo de Castilla, donde no la cuidaban bastante bien. Los vecinos d’Empúries, cuando la localizaron, erigieron una ermita que, años más tarde, había de convertirse en el convento de los Servitas.
Es una advocación que los frailes Servitas propagaron por la comarca. Así pues, el pueblo de Pontós, una vez al año, hacía su romería al santuario de la "Mare de Déu de Gràcia d'Empúries", como casi todas las parroquias las tenían a un santuario más o menos lejano. Se trataba de unos desplazamientos que obligaban a pernoctar fuera de los propios domicilios (Lo relata Josep M. Marquès en su libro Una historia de la diócesis de Girona). En l'Escala, hoy día, aún existe la calle de Gracia que era el camino para ir al santuario de la "Mare de Déu de Gràcia a Empúries".
El año 1601 en la capilla de Santa María de Gracia había un beneficio. La imagen que en ella se veneraba era de loza, medía tres palmos de altura y sostenía el hijo, que estaba desnudo, con el brazo derecho.
El convento de los monjes Servitas de Santa María de Gracia d’Empúries fue fundado el año 1605 en una ermita, ya existente, con esta dedicación: “la casa Capella y Ermita de Nostra señora de Gratia” como consta en el documento de la fundación.
El convento estaba en el mismo paraje de las ruinas de la Neápolis griega, a poniente. Su iglesia era un gran edificio rectangular, con contrafuertes en los muros laterales, construido con piedras sin escuadrar y argamasa. Después de la desaparición de la comunidad monástica quedó en abandono. En la actualidad parte de la estructura de la iglesia se conserva y sirve de sala del Museo Monográfico de las excavaciones.
La comunidad se extinguió el año 1835. Al irse los frailes Servitas la imagen de la "Mare de Déu de Gràcia" pasó a la actual iglesia parroquial de Sant Martí d’Empúries, que comenzó a construirse el año 1507.