DOMINGO II DE PASCUA

Misa a las 12 del mediodía, cantada por los asistentes y con acompañamiento de órgano.

Como siempre, os agradecemos vuestra participación muy valiosa.

La comunidad cristiana de Sant Martí d'Empúries da la bienvenida y recibe con alegría a todos y a cada uno de los visitantes y participantes de cualquiera nacionalidad y religión.

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COMENTARIO: 

Jesús se puso en medio

Los seguidores de Cristo somos aquellos que cada día recibimos la gracia de creer. Y cada día hemos de reafirmar nuestra confianza en Jesús, y adherirnos de corazón a su persona. Creer en el Hijo de Dios es tener vida en su nombre. No es tener una vida mejor, ni más larga, ni más colmada de éxitos. Simplemente tener vida en nombre de Jesús. Creer no es un vestido guardado en el armario para asistir a misa el domingo. Creer es la decisión más importante que cada mañana hemos de retomar y confirmar. Después, durante el día, esta determinación habrá de conformar nuestra vida.

Eso nos inducirá a hacer un camino de seguimiento de Jesús, y a preguntarnos por su manera de pensar y de hacer, por su íntima relación con el Padre y su amor por todos los seres humanos, manifestado esencialmente en la entrega de su vida por todos nosotros. Entonces, podremos decir: creer en Jesucristo es recibir su vida, es conocer el amor que Dios nos tiene, es continuar su obra, es hacer presente el Reino y aprender a hacer la voluntad del Padre.

Todo esto se traduce y concreta en el amor y servicio a los hermanos: porque dentro de la comunidad ninguno no viva en la indigencia. El amor es fruto de la fe: he aquí la victoria que ya ha vencido al mundo. El amor fraterno de las comunidades que confiesan Cristo hace visible su resurrección. El mundo necesita ver comunidades que se aman para poder creer la palabra. De otro modo, sin amor y comunión entre hermanos, el mensaje corre el peligro de que el viento se lo lleve.

Cuando hoy sientas que Jesús en el evangelio te dice “se creyente”, piensa que quiere decirte: vive la fe en mi de tal manera que al verte a ti todos puedan reconocerme.