La Virgen que es del Carmen
ojos azulados, cara rosada,
qué alegría al amanecer !
Qué alegría a la mañana !
Los ángeles entorno le cantan
la gloria que ella se merece,
mientras en su cabeza se ciñe
la corona del Divino.
¿Por qué, por qué, tanto regocijo?
¿Por qué tanta alegría?
Y un pájaro que allí venía
dijo, mientras brincaba:
“Es la gran Virgen del Carmen,
la que al fiel sonríe,
mientras su Hijito ríe, ríe...
y los serafines van cantando”.
Poema escrito por el beato Pere Tarrés en la fiesta de la Virgen del Carmen de 1937 -mientras estaba escondido- como felicitación a su madre.
(La advocación mariana a la Virgen del Carmen cuenta con una gran devoción en nuestra Diócesis, especialmente en las poblaciones de la costa).