DOMINGO XXXI DE DURANTE EL AÑO
Misa a las 12 del mediodía, cantada por los asistentes y con acompañamiento de órgano.
Como siempre, os agradecemos vuestra participación muy valiosa.
La comunidad cristiana de Sant Martí d'Empúries da la bienvenida y recibe con alegría a todos y a cada uno de los visitantes y participantes de cualquiera nacionalidad y religión.
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COMENTARIO:
Mirar a la manera de Dios
En el relato del evangelio de hoy hay un momento culminante. Es cuando Jesús, en medio de aquella concurrencia, evadido de cuanto pasa a su alrededor, nada más llegar en el árbol que sirve de atalaya a Zaqueo, alzó los ojos y le miró fijamente. Si pudiéramos parar este instante sentiríamos enmudecer la multitud y latir fuerte el corazón del cobrador de impuestos, al verse descubierto. Jamás sabremos que experimentó Zaqueo con la mirada de Jesús, acostumbrada a acoger pecadores y "excluídos". Pero sí que sabemos que Jesús miraba a la manera de Dios, que penetra el corazón de las personas. Y que aquellos a quienes nosotros rechazamos y tenemos etiquetados como perdidos, Él los busca con gran avidez para curtirlos de amor y misericordia.
Jesús nos ha revelado el amor de Dios y nos lo ha hecho experimentar, para que sepamos que es siempre más fuerte y inmensamente más grande que todos los pecados de los hombres. Y aunque todo el mundo creado sea como un grano de polvo o una pizca de rocío, el Señor lo sostiene amorosamente con su aliento inmortal, y la vida de un solo Zaqueo es para Él tan entrañablemente amada que, si se extravía, no dudará en enviar su Hijo a buscarla: el Hijo del hombre ha venido a buscar y salvar aquello que se había perdido.
Este evangelio es un canto de Dios a la vida. Un himno a su misericordia, saciada de paciencia, llena de compasión. Es el Padre que sale a encontrar al hijo. Es la invitación a la mesa de la fiesta. Es la gloria de Dios que se complace en la vida de los hombres.
Dios siempre busca a sus hijos los hombres, ¡cómo tenemos que recordarlo! Y, también, tenemos que revisar nuestra vocación cristiana, para aprender a mirar a la manera de Dios.