DOMINGO XIV DEL TIEMPO ORDINARIO 

Misa a las 12 del mediodía, cantada por los asistentes y con acompañamiento de órgano.  

Como siempre, os agradecemos vuestra participación muy valiosa.

La comunidad cristiana de Sant Martí d'Empúries da la bienvenida y recibe con alegría a todos y cada uno de los visitantes y participantes de cualquier nacionalidad y religión.

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COMENTARIO:

Con el envío de los setenta y dos, parece que Lucas quiere recordar que la misión atañe a todos los bautizados, no de manera individual, sino como comunidad. La misión comienza por la oración, nos convoca a vivir según los valores del Reino, a ser portadores de paz y hacerlo con las mismas actitudes que encontramos en Jesús. El peor fracaso sería que no viviéramos como "corderos" sino como "lobos".

El Reino no es nuestro, es un don que Dios quiere conceder a la humanidad. Isaías y Pablo (primera y segunda lecturas) nos ayudan a entenderlo: Dios invita a vivir con alegría y esperanza porque él mismo quiere ofrecer paz, bienestar, consuelo, amor materno. Quien vive y anuncia el Reino pone todas sus capacidades en conocer y en hacer conocer la persona de Jesucristo, que se ha dado totalmente.

El regreso de los enviados es un estallido de alegría. ¡Ha ido mejor de lo que pensaban! Se dan cuenta de que, cuando una pequeña comunidad vive según el estilo de Jesús, el mal va retrocediendo. Y el Reino está presente incluso donde el enviado no es bien recibido, porque ya está en el corazón de esta persona, y Dios no deja de estimar a los que aún no le han acogido.

Matheo Peregrina Ramírez, de Palamós.

¡La enhorabuena a sus padres David y Davinia y familiares!