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Key 1
Hoy es Domingo, el Día del Señor
DOMINGO V DE DURANTE EL AÑO Misa a las 12 del mediodía, cantada por los asistentes y con acompañamiento de órgano. Como siempre, os agradecemos vuestra participación muy valiosa. La comunidad cristiana de Sant Martí d'Empúries da la bienvenida y recibe con alegría a todos y a cada uno de los visitantes y participantes de cualquiera nacionalidad y religión.
* * * * * COMENTARIO: Encuéntrate con Dios para poderte encontrar con los hombres Como en una lanzadora, el hilo de nuestra vida se va consumiendo y se acaba, los días penosos de esfuerzo abochornador llegan a la noche y se tiñen de oscuridad. Desde la lógica humana el problema del dolor y del mal y el escándalo del sufrimiento de los inocentes no tienen respuesta coherente. El creyente, pero, vive gracias a la esperanza, se fía de Dios, a pesar de todo, y le acepta. Y, enfrente de los hecchos incomprensibles, más allá de pedir explicaciones, mira fijamente a Jesús crucificado. Entonces se pone a su disposición, en las manos de Dios, libremente, con dedicación incondicional, haciéndose esclavo de todos, al servicio del evangelio, por amor de Cristo y de los hermanos. Así lo hizo Pablo y tantos y tantos verdaderos apóstoles. Anunciar el evangelio no como un asalariado sino de manera gratuita, por pura gracia, por el gozo de la vocación, de haber estado llamado a seguir los pasos del Maestro, sin mérito alguno. Y pobre de mi que no lo hiciera! El evangelio nos explica la intensa jornada apostólica de Jesús: en la sinagoga, en casa de Pedro, en la puerta de la ciudad, todos le buscan, hasta la puesta del sol. Entre tanta actividad es fácil dejarse absorber por los compromisos y las urgencias de la gente, perder el norte por los halagos y la popularidad. El sabe, pero, que sin la plegaria y la comunión con el Padre no puede haber "servicio". Cuando aún era de noche, buscó un lugar solitario y se quedó. Todos le buscaban. Simón y sus compañeros parecen extrañados al encontrarle orando. A ellos y a nosotros mucho nos cuesta entender que en el encuentro con Dios es donde se realiza el verdadero encuentro con los hombres. |