DOMINGO I DE CUARESMA

Misa a las 12 del mediodía, cantada por los asistentes y con acompañamiento de órgano.

Como siempre, os agradecemos vuestra participación muy valiosa.

La comunidad cristiana de Sant Martí d'Empúries da la bienvenida y recibe con alegría a todos y a cada uno de los visitantes y participantes de cualquiera nacionalidad y religión.

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COMENTARIO:

La audacia de la fe

Nuestra fe se fundamenta en el triunfo del resucitado. Es, pues, una fe de victoria. Una fe pascual. Ahora bien, mientras caminamos, experimentamos el misterio del mal y, como todos, sufrimos sus consecuencias. Así, nuestra vida está tejida de éxitos y de fracasos, de situaciones dolorosas y de otras de satisfactorias. Todas. pero, están inscritas dentro del plan providente que nuestro Señor nos ofrece y que nosotros debemos saber gestionar. La prueba es inherente a nuestra condición de peregrinos. El desierto, lugar de lucha y de purificación, escuela de plegaria y casa de austeridad, es necesario.

Trátase de vivir nuestro desierto con la mirada puesta en Jesucristo. Con fe audaz y sin miedo, ciertamente, y dejándonos penetrar por su intimidad, que nos foralezca en la lucha, constantes en el esfuerzo y generosos en el desprendimiento. La llamada evangélica exige la conversión, y nos engañaríamos si pensásemos que puede seguirse a Jesús sin llevar la cruz cada día. El camino del cristiano, hoy y siempre, implica renunciamiento, riesgo, privaciones y sacrificio. Pero entraña paz. Una paz que nadie más que Jesucristo no puede dar. Una paz simbolizada por la convivencia de Jesús entre animales fieros y ángeles que le alimentaban.

Es desierto que se torna paraíso, tierra seca que florece, la humanidad que reencuentra la armonía y recupera la condición original de hermandad. Sin guerras, ni hambre, ni explotación, ni miseria, ni violencia.

Ha llegado la hora del desierto, de la conversión, de descubrir la misericordia de Dios, de pedir que cambie nuestro corazón de piedra en corazón de carne, para que también nosotros seamos misericordiosos con nuestros hermanos.

Carlota Juan Ruiz, de l'Escala

La enhorabuena a sus padres Eloi y Patricia y a los familiares!